africallora
Miembro conocido
El Gobierno ha cerrado un acuerdo con los sindicatos para subir el salario mínimo interprofesional (SMI) hasta los 1.184 euros mensuales en 2025. Un año más, y con este van cinco, la patronal ha rechazado sumarse al pacto que acaban de sellar CCOO y UGT con el Ministerio de Trabajo cuando está a punto de acabar el mes de enero y en un contexto de incertidumbre en el que España se había quedado sin esta referencia salarial mínima legal tras decaer la prórroga en el decreto ómnibus que tumbó el Congreso la semana pasada y que ha reactivado en parte el Ejecutivo.
Ha sido la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, la encargada de anunciar el acuerdo bipartito por el que el SMI va a subir un 4,4%, lo que implica un aumento de 50 euros al mes desde los 1.134 actuales. "El diálogo social funciona", ha valorado la ministra de Trabajo, que en esta ocasión, al contrario de lo sucedido en la mesa de negociación para la reducción de la jornada laboral, ha agradecido a los empresarios sus aportaciones.
La CEOE ha seguido la misma estrategia que el año pasado y en la reunión anterior propuso un alza del 3%, en línea con las directrices fijadas en la negociación colectiva, lo que implicaría subir el SMI en 34 euros, hasta los 1.168 mensuales. Cantidad insuficiente tanto para el Ministerio de Trabajo como para los sindicatos, que en todo caso han valorado positivamente el ejercicio negociador que esta vez sí han hecho los representantes de la patronal.
CCOO y UGT habían propuesto elevar ya el SMI hasta los 1.200 euros, pero Trabajo tampoco aceptó esta posición porque, si la de la CEOE no llegaba a la parte baja de la horquilla establecida por los expertos (3,4%), esta de los sindicatos superaban la parte alta, fijada en ese 4,4%. Con todo, ambas organizaciones sindicales -que aún tienen que ratificar el preacuerdo a nivel interno- han valorado el consenso alcanzado como un nuevo avance en materia salarial y han conseguido que el Ministerio de Yolanda Díaz acceda a abrir una nueva mesa de negociación para abordar algunas de las reivindicaciones que han quedado fuera de este pacto.
Los sindicatos, por su parte, han adelantado que en esa mesa se abordará también el problema de la compensación y absorción de los complementos salariales para que todos los trabajadores vean reflejado el incremento del SMI de forma efectiva. Y también se buscará avanzar hacia una redacción clara de la norma que garantice que los convenios colectivos afectados por la subida del salario mínimo se adapten de manera inmediata con efectos retroactivos a 1 de enero.
Asimismo, tanto CCOO como UGT han insistido en la necesidad de que el SMI quede exento de tributar en el IRPF y han avanzado que seguirán incidiendo en este tema, aunque todo apunta a que en esta ocasión el Gobierno no adaptará el mínimo exento y un elevado porcentaje de sus perceptores tendrán que empezar a pagar impuestos por esta renta. La propia Díaz ha recordado que su Ministerio es partidario de que el SMI no pague IRPF, pero la competencia no radica en su departamento, sino en el de Hacienda, que parece decidida en esta ocasión a no adaptar el impuesto a la subida del SMI.
Se trata, por tanto, de demandas sindicales que se debatirán más adelante en una mesa de negociación en la que también estarán las organizaciones empresariales. Los propios representantes de los sindicatos han admitido ser conscientes de que son temas "de mucha envergadura" para los que es "fundamental que la patronal entre en el proceso de negociación", en palabras de la secretaria confederal de Acción Sindical de CCOO, Mari Cruz Vicente. "Son asuntos que deben ser mitigados y por eso los hemos incorporado en este preacuerdo", ha insistido el vicesecretario general de Política Sindical de UGT, Fernando Luján.
--
Ha sido la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, la encargada de anunciar el acuerdo bipartito por el que el SMI va a subir un 4,4%, lo que implica un aumento de 50 euros al mes desde los 1.134 actuales. "El diálogo social funciona", ha valorado la ministra de Trabajo, que en esta ocasión, al contrario de lo sucedido en la mesa de negociación para la reducción de la jornada laboral, ha agradecido a los empresarios sus aportaciones.
La CEOE ha seguido la misma estrategia que el año pasado y en la reunión anterior propuso un alza del 3%, en línea con las directrices fijadas en la negociación colectiva, lo que implicaría subir el SMI en 34 euros, hasta los 1.168 mensuales. Cantidad insuficiente tanto para el Ministerio de Trabajo como para los sindicatos, que en todo caso han valorado positivamente el ejercicio negociador que esta vez sí han hecho los representantes de la patronal.
CCOO y UGT habían propuesto elevar ya el SMI hasta los 1.200 euros, pero Trabajo tampoco aceptó esta posición porque, si la de la CEOE no llegaba a la parte baja de la horquilla establecida por los expertos (3,4%), esta de los sindicatos superaban la parte alta, fijada en ese 4,4%. Con todo, ambas organizaciones sindicales -que aún tienen que ratificar el preacuerdo a nivel interno- han valorado el consenso alcanzado como un nuevo avance en materia salarial y han conseguido que el Ministerio de Yolanda Díaz acceda a abrir una nueva mesa de negociación para abordar algunas de las reivindicaciones que han quedado fuera de este pacto.
Nueva mesa de negociación
En concreto, la propia Díaz ha anunciado que en un plazo de dos meses su departamento volverá a reunir a los agentes sociales para tratar una serie de cuestiones que son reivindicaciones clásicas de CCOO y UGT pero que no se han introducido en este real decreto por la urgencia y la prioridad de determinar ya la cuantía del SMI para 2025. Para más adelante se ha dejado la adaptación completa de la directiva europea de salarios mínimos para "desplegarla en su integridad", según ha anunciado la vicepresidenta, que también ha avanzado que la Inspección de Trabajo realizará campañas específicas para garantizar el cumplimiento del salario mínimo en los sectores afectados. (Ojo con esto )Los sindicatos, por su parte, han adelantado que en esa mesa se abordará también el problema de la compensación y absorción de los complementos salariales para que todos los trabajadores vean reflejado el incremento del SMI de forma efectiva. Y también se buscará avanzar hacia una redacción clara de la norma que garantice que los convenios colectivos afectados por la subida del salario mínimo se adapten de manera inmediata con efectos retroactivos a 1 de enero.
Asimismo, tanto CCOO como UGT han insistido en la necesidad de que el SMI quede exento de tributar en el IRPF y han avanzado que seguirán incidiendo en este tema, aunque todo apunta a que en esta ocasión el Gobierno no adaptará el mínimo exento y un elevado porcentaje de sus perceptores tendrán que empezar a pagar impuestos por esta renta. La propia Díaz ha recordado que su Ministerio es partidario de que el SMI no pague IRPF, pero la competencia no radica en su departamento, sino en el de Hacienda, que parece decidida en esta ocasión a no adaptar el impuesto a la subida del SMI.
Se trata, por tanto, de demandas sindicales que se debatirán más adelante en una mesa de negociación en la que también estarán las organizaciones empresariales. Los propios representantes de los sindicatos han admitido ser conscientes de que son temas "de mucha envergadura" para los que es "fundamental que la patronal entre en el proceso de negociación", en palabras de la secretaria confederal de Acción Sindical de CCOO, Mari Cruz Vicente. "Son asuntos que deben ser mitigados y por eso los hemos incorporado en este preacuerdo", ha insistido el vicesecretario general de Política Sindical de UGT, Fernando Luján.
--
El Gobierno pacta con los sindicatos subir el SMI a 1.184 euros y la patronal rechaza el acuerdo por quinto año
El Gobierno ha cerrado un acuerdo con los sindicatos para subir el salario mínimo interprofesional (SMI) hasta los 1.184 euros mensuales en 2025. Un año más, y con este van...
acortar.link