Raquel, hay ejemplos en los que sí se ha admitido el abandono (me remito a los ejemplos relacionados en el memento, y que nos pueden servir cómo guía el ver los casos en los que se ha entendido que hay abandono y en los que no). Tomando una serie de precauciones no lo veo tan aventurado. ¿Que al final esto no es una ciencia exacta y que, por bien que lo hagamos siempre puede haber cierto riesgo?, vale, ya lo he reconocido.
Pero aún así, os vuelvo a hacer el mismo planteamiento a los "prudentes" o "escaldados" (por experiencias anteriores), ya que no os atrevéis con la opción de dar de baja por abandono (y que sólo sugiero tomar cuando se han dado una serie de circunstancias, pero bueno, es igual, dejad aparcada esa opción),
¿por qué no os planteais también alternativas al despido? sobretodo cuando, como es el caso que expone el consultante, sabemos que es justo lo que quiere el trabajador desaparecido.
¿por que ceder a ese chantaje tan fácilmente? ¿por que recompensar su actitud con ese premio???
Ya lo he propuesto antes, sancionad, sancionad, sancionad. Se veis defendible el despido, veréis tambien defendible una sanción de empleo y sueldo, ¿no?
Y si lo vuelve a hacer, nueva sancion de empleo y sueldo, y así cada vez, y aplicando la máxima sanción permitida (excepto el despido, que no será una sancion sino un premio en estos casos).
Aunque, como ya he dicho, siguiendo la estrategia que ya he comentado, la de amenazar con la baja por abandono, lo normal es que aprezcan rápido. Entonces valorais sancionar.
Que preferis no amenazar con lo del abandono porque sabéis que al final, por muchos requerimientos y advertencias que le hagais en ese sentido y por mucho caso omiso que el trabajador pueda hacer a las mismas al final no os vais a atrever a hacerlo, muy bien, pues requerid solo a que se reincorpore y/o justifique su ausencia y esperad. Ya le sancionareis a la vuelta, y además tampoco le vais a pagar por el tiempo que ha estado desaparecido. Si el trabajador nos sorprende con alguna justificación, eso tambien echaria por tierra el despido, que es lo que planteais.
Vale, tal vez os da miedo que el trabajador entonces "se coja la baja" (sí, porque ya sabemos que las bajas, aunque teóricamente las da el médico, las cosas funciona como funcionan). Aún así, creo que vale la pena no ceder.
De acuerdo, cada uno conoce sus circusntancias, las de cada caso concreto..., en ocasiones, en empresas pequeñitas, tal vez la solucion más cómoda sea optar por un despido que sabemos el trabajador no va a impugnar y nos quitamos así de encima a un trabajador molesto y sin coste ni riesgos (el coste ya lo pagaremos entre todos con el paro). Pero en empresas medianas o grandes, yo a eso le veo los riesgos ya comentados. No se puede claudicar tan fácilmente, además de que, por principios, no pienso dar facilidades a este tipo de argucias.
En fin, resumiendo, que si lo del abandono os da repelus, que tengais en cuenta que hay otras opciones distintas al despido que pueden tener cabida y que no supondran premiar y fomentar este tipo de conductas.
¿no?
Pero aún así, os vuelvo a hacer el mismo planteamiento a los "prudentes" o "escaldados" (por experiencias anteriores), ya que no os atrevéis con la opción de dar de baja por abandono (y que sólo sugiero tomar cuando se han dado una serie de circunstancias, pero bueno, es igual, dejad aparcada esa opción),
¿por qué no os planteais también alternativas al despido? sobretodo cuando, como es el caso que expone el consultante, sabemos que es justo lo que quiere el trabajador desaparecido.
¿por que ceder a ese chantaje tan fácilmente? ¿por que recompensar su actitud con ese premio???
Ya lo he propuesto antes, sancionad, sancionad, sancionad. Se veis defendible el despido, veréis tambien defendible una sanción de empleo y sueldo, ¿no?
Y si lo vuelve a hacer, nueva sancion de empleo y sueldo, y así cada vez, y aplicando la máxima sanción permitida (excepto el despido, que no será una sancion sino un premio en estos casos).
Aunque, como ya he dicho, siguiendo la estrategia que ya he comentado, la de amenazar con la baja por abandono, lo normal es que aprezcan rápido. Entonces valorais sancionar.
Que preferis no amenazar con lo del abandono porque sabéis que al final, por muchos requerimientos y advertencias que le hagais en ese sentido y por mucho caso omiso que el trabajador pueda hacer a las mismas al final no os vais a atrever a hacerlo, muy bien, pues requerid solo a que se reincorpore y/o justifique su ausencia y esperad. Ya le sancionareis a la vuelta, y además tampoco le vais a pagar por el tiempo que ha estado desaparecido. Si el trabajador nos sorprende con alguna justificación, eso tambien echaria por tierra el despido, que es lo que planteais.
Vale, tal vez os da miedo que el trabajador entonces "se coja la baja" (sí, porque ya sabemos que las bajas, aunque teóricamente las da el médico, las cosas funciona como funcionan). Aún así, creo que vale la pena no ceder.
De acuerdo, cada uno conoce sus circusntancias, las de cada caso concreto..., en ocasiones, en empresas pequeñitas, tal vez la solucion más cómoda sea optar por un despido que sabemos el trabajador no va a impugnar y nos quitamos así de encima a un trabajador molesto y sin coste ni riesgos (el coste ya lo pagaremos entre todos con el paro). Pero en empresas medianas o grandes, yo a eso le veo los riesgos ya comentados. No se puede claudicar tan fácilmente, además de que, por principios, no pienso dar facilidades a este tipo de argucias.
En fin, resumiendo, que si lo del abandono os da repelus, que tengais en cuenta que hay otras opciones distintas al despido que pueden tener cabida y que no supondran premiar y fomentar este tipo de conductas.
¿no?