En este caso pagan justos por pecadores, que se diría.
La culpa fue de los "listillos" que cuando les pillaron con el carrito de los helados por lo de falsos autónomos, usaron y abusaron del sistema RED, y colaron por la puerta de atrás lo que habían perdido por la de delante con inspección.
Y tal y como elucubras, para los despidos "testiculares" individuales, la cosa presenta graves incertidumbres. Para los despidos disciplinarios bien justificados, o los colectivos vía ERE (procedimientos reglados y con acreditación y tutela), no veo mayor riesgo.
Pero para estos casos de altas de oficio por inspección por fraude laboral, la vía del despido individual arbitrario (por mucho que se reconozca y pague la indemnización de 33 días), la veo MUY arriesgada. A fin de cuentas, si se está dispuesto a reconocer la "improcedencia", es que se reconoce que no se debía "proceder" con ese despido.