No se…las encomias de escala existen y es razonable que se de tratamiento diferenciado a grupos diferenciados, por ejemplo, una SL de un empleado le supondrá un mayor coste proporcional este asunto que a una SL de 100.
Salu2
Sí, estoy contigo. La verdad es que le estaba contestando con ironía a Cachilipox, con todo mi cariño y amor! Pero por escrito, a veces no se aprecia bien el tono y el fondo de lo que lo quieres decir. Era pura ironía del absurdo! Una microasesoría o una microempresa no tiene la misma capacidad económica, ni de gestión, ni la estructura para poder hacer frente a esto de la misma manera.
En mi caso, como ya he comentado en otro hilo, me planteo seriamente dejar la profesión, después de 38 años en ella, viendo cómo se van precipitando las cosas. Y espero, si finalmente lo decido, no tomármelo como un drama, sino como una situación natural más de la vida. Por tener abierta esta puerta profesional estoy diciendo que no a otras cosas en mi vida que me harían plenamente feliz y con las que tendría mejor calidad de vida (eso que algunos llaman reinventarse). Espero saberme escuchar bien. Ahora sí que estoy llegando al límite y hace 20 años, ya lo traspasé y casi me voy al otro barrio, por no saber gestionar bien el estrés laboral.
Y es que, cuando tomo consciencia de todo lo que está pasando desde hace 4 años en nuestra profesión y en este sistema, que parece que ha enloquecido, pues para mí, la vida, mi familia y mi salud emocional y física pasa por encima de los trámites desmedidos de este maravilloso plan de pensiones obligatorio (que puede estar por los 25-35€ mensuales de retribución). ¿Por ese importe, esto va a pasar por encima de mis clientes más importantes e incluso de mi propio descanso? I'm sorry, pero NO. Yo no tengo más capacidad de gestión: ya la he agotado toda!!!
Y si el sistema algún día, nos llega a obligar a respirar sólo 2 veces por minuto, porque falta oxígeno en el planeta y solo los grandes/ricos pueden huir al planeta Sirio (rico en oxígeno), espero también saberle poner límites y decirle que NO (palabra mágica que pronunciamos muy pocas veces, pero que por auto-respeto a uno mismo empiezo a practicarla todo lo que puedo)!!!
Perdón por el rollo y:
¡¡¡Viva la vida!!!